Este desafío creativo que inicio junto a mi amiga y buddy creativa @cristinalopezlin representa la conclusión de un proceso de búsqueda que ambas comenzamos hace un largo tiempo y que tenía que ver con cómo reorientar nuestra vida profesional para adaptarla a nuestros intereses y pasiones.
Nos acompañamos en ese proceso, aprendimos, nos fortificamos y hoy iniciamos juntas este recorrido que tendrá cada semana una publicación en Instagram y cada mes una nueva entrada en el blog. Hay una frase que resume todo el proceso de aprendizaje que hemos hecho y el por qué de este desafío: “No escribas sobre lo que amas, sino sobre lo que solo tú amas”
Y ese será el objetivo. Mostrar nuestra particular mirada del mundo y de lo que nos rodea. Crear un portafolio de imágenes y palabras sobre lo que cada una ama. En el caso de Cristina será su exploración por la naturaleza urbana.
En mi caso será explorar la capacidad educativa de los viajes y su potencial para derrumbar las fronteras.
El mundo gira en el sentido de la movilidad y a pesar de que los seres humanos son cada día menos pertenecientes y cada vez más nómades, las fronteras son insistentemente reproducidas por quienes se benefician de las divisiones y los conflictos.
Entiendo el viaje como instancia de Interacción y Encuentro. El viaje en tanto movimiento, nos insta a cambiar la perspectiva de la mirada, nos invita a leer Otros lenguajes, a escuchar Otros sentires, a pensar Otros aconteceres. En definitiva a encontrarnos con unos Otros tan diferentes como similares.
Entiendo el viaje como intercambio de saberes, como interacción de seres que se desarrollan en las diferencias y en el intercambio se construye un aprendizaje activo, participativo, un Aprehendizaje. En ese sentido el viaje, el movimiento, el traslado produce la interacción entre lo que llevo aprendido y lo que hay para aprender allí donde desembarco.
Entiendo el viaje como instancia de creación de vínculos interculturales, de apropiación de los saberes de Otros que, en tanto saberes, son siempre universales y por lo tanto compartidos.
Entiendo el viaje como una oportunidad para aprehender las identidades culturales, revalorizarlas y conservarlas PERO, en ningún caso, como argumento de creación de más fronteras entre los seres humanos ni de separación y rechazo del Otro.
Mi desafío será encontrar esa diversidad cultural, esos cofres del tesoro que cada comunidad produce a través de su historia, modifica a través de las coyunturas y revaloriza para la propia preservación de la comunidad.
Mi desafío será romper mis propios estereotipos, los que reproducen las guías de viaje tradicionales, los límites entre el Nosotros y los Otros, reconocer la artificialidad de todas las fronteras y pensar las identidades culturales como híbridos contextualizados social y políticamente.
Aquí vamos!